LAS FRÍAS NOCHES
Hacíamos muchas cosas por tratar de encontrar la excusa creíble para darnos una vuelta a la Civilización (Trujillo), pero no se podía. Es que a caso nos estábamos aburriendo? teníamos que aguantar y seguir con la adaptación.
Todas la noches, sin luz y sin nada más que hacer, sólo nos quedaba conversar tanto y despejar las dudas que nos aquejaban como pareja o yo qué sé, tantas cosas que decir o jugar a las cartas o naipes. Nos hicimos cuasi expertos en cuetión de los casinos ufff se armaba un capeonato de murte, claro está que mi esposa me enseñó todo lo que sabía y así la pasábamos ganando o perdiendo. Pero eso duró muy poco tiempo porque eso aburre, imagínense así todos las noches...nos acostábamos como las gallinas, a las 8 pm. prendiendo la vela o la lámpara de kerosene, que por cierto ya no la van a vender nunca más porque padres de la patria ya la impidieron, claro, ellos tienen como alumbrarse en casa o nos les falta nada. Me abrigaba con mi chompa de polar y mi pantalón de lo mismo para que nada del frío que había entrara en nuestros cuerpos.
Hasta mañana amor...hasta mañana, me decía ella, y sentía en su voz una tristeza y un reproche por mi culpa. Te amo Zaidita.
Sólo esperábamos el fin de mes para irnos. Contaba los días para que llegue el día y nos preparábamos para el viaje hasta tres a cuatro días antes. ¡Qué tal ansiedad ¿no?¡
Todas la noches, sin luz y sin nada más que hacer, sólo nos quedaba conversar tanto y despejar las dudas que nos aquejaban como pareja o yo qué sé, tantas cosas que decir o jugar a las cartas o naipes. Nos hicimos cuasi expertos en cuetión de los casinos ufff se armaba un capeonato de murte, claro está que mi esposa me enseñó todo lo que sabía y así la pasábamos ganando o perdiendo. Pero eso duró muy poco tiempo porque eso aburre, imagínense así todos las noches...nos acostábamos como las gallinas, a las 8 pm. prendiendo la vela o la lámpara de kerosene, que por cierto ya no la van a vender nunca más porque padres de la patria ya la impidieron, claro, ellos tienen como alumbrarse en casa o nos les falta nada. Me abrigaba con mi chompa de polar y mi pantalón de lo mismo para que nada del frío que había entrara en nuestros cuerpos.
Hasta mañana amor...hasta mañana, me decía ella, y sentía en su voz una tristeza y un reproche por mi culpa. Te amo Zaidita.
Sólo esperábamos el fin de mes para irnos. Contaba los días para que llegue el día y nos preparábamos para el viaje hasta tres a cuatro días antes. ¡Qué tal ansiedad ¿no?¡
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| Dentro del Colegio,claro es de día. |
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